Los 70 años de Waldo Leyva
La Velada de homenaje a Waldo y para entregarle el libro preparado en homenaje a él por sus 70 años y del cual forman parte, se realizó la noche del pasado miércoles 10 y resultó estupenda.
Como ustedes se enteraron, él no sabía de esta edición mexicana del libro y menos sabía de la realización de la Velada. A él yo le dije que había estado en comunicación con la Directora General de Cultura de la Representación del Estado de Tabasco en el DF y que se había concretado una presentación; así que preparé una invitación digital para solamente enviársela a él, donde aparece una Lectura de mi poesía.
A todo mundo que se invitó se le pidió discreción para que realmente resultara sorpresa para Waldo. Así fue.
La Velada comenzó con una pantalla al fondo (en lugar del letrero fijo que comúnmente se utiliza), en la cual se proyectó la invitación que le envié a Waldo y sobre la mesa había ejemplares de mis libros. La Directora General de Cultura de la Representación del Estado de Tabasco en el DF hizo mi presentación clásica con datos curriculares y me cede la palabra. Leí un poema que tiene un referente a La Habana, luego un poema dedicado a Waldo que escribí hace años y que él conoce. Finalmente, leí un poema dedicado a los abuelos y al terminar su lectura hice mención de que había leído ese poema porque veía que algunos de los presentes seguramente tendrían nietos porque se percibía claramente que tenían 60 años o más, aunque había quienes ya tenían más edad como Waldo Leyva que estaba presente y que había ya cumplido sus 70 años, muy recientemente y, aprovechando el momento y que estaba presente le iba a entregar un regalo que tenía para él con ese motivo, me levanto de la silla, dejo la mesa y voy hasta donde está Waldo, a quien habíamos sentado en la primera fila por su cargo de Consejero Cultural de la Embajada de Cuba en México y estaba sentado a un lado del Representante del Gobierno del Estado de Tabasco en el DF (el jefe de esa oficina de representación). Le entrego el libro y al verlo pone los ojos de sorpresa, mientras en la pantalla se proyecta una imagen de la portada del libro, luego una fotos de él y a un lado el mensaje: “Felicidades Waldo”, y sigue una presentación de Power Point con fotos de Waldo. En lo que se estaba proyectando la presentación de power point con fotos de Waldo, los autores que estaban presentes (sólo quince porque algunos viven en otras ciudades y más de 50 en el extranjero) tomaron el micrófono para decir algunas palabras, lo mismo hicieron algunos de los asistentes. Después de eso anuncié que había algunos amigos que estaban lejos y no podían estar físicamente presentes, pero que se hacían presentes a través un video y los pasaron en la pantalla (con audio, claro). Al terminar los videos, leí mensajes que mandaron algunos de ustedes (como 35 mensajes muy breves) y luego habló Waldo (lo dejamos hablar hasta el final). Para cerrar, le entregué ejemplares al Representante para la biblioteca de la Casa de la Cultura de Tabasco en el DF, dijo unas palabras y concluyó el acto. En ese momento se escucharon dos de los poemas emblemáticos de la conmemoración, que han sido musicalizados: “Defendiendo mi sueño” cantado por TrovAndante y “Mis desacuerdos” cantado por Silvio Rodríguez. Seguimos don el brindis hasta las 11 de la noche y como fondo se escucharon poemas musicalizados y dichos por Waldo, mientras estábamos con una copa de vino en la mano, recordándolos y brindando también con ustedes.
Waldo estuvo muy contento y sorprendido.
Muchas gracias por participar, por ser parte de este homenaje.
Les enviaré algunas fotos del evento junto con mi saludo afectuoso y mi abrazo entrañable.
Roberto
12 de julio de 2013.
Publicado por
Roberto Arizmendi
Etiquetas
- Roberto Arizmendi
- Waldo Leyva